Joan Antoni Llinares Gómez, Director de la Agencia antifraude valenciana

Joan Antoni Llinares Gómez ha tomado posesión esta mañana, en Les Corts, del cargo de Director de la Agencia de prevención y lucha contra el fraude y la corrupción de la Comunidad Valenciana, con el objetivo de poner en marcha la agencia creada por la Ley 11/2016 de 28 de noviembre.

Joan Antoni Llinares fue nombrado por las Cortes Valencianas el mes pasado por 65 votos a favor, 24 en blanco y 5 nulos.

El abogado Joan Antoni Llinares, (Alzira 1953) es experto en Derecho Ambiental –es cofundador de la comisión jurídica de Acció Ecologista-Agró que llevó a cabo campañas contra el proyecto Castor- y en la gestión de entidades culturales.

Es funcionario de habilitación nacional, habiendo ejercido desde septiembre de 1982 a abril de 1988. Posteriormente pasó al IVAM (Instituto valenciano de arte moderno), primero, como Técnico de gestión administrativa y posteriormente como administrador. De ahí marchó como gerente al Museo Nacional de Cataluña.

El 30 de Julio de 2009 tomó posesión como director general del Palau de la Música catalana al ser designado por el Ministerio de Cultura, la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona para dirigirlo después del expolio perpetrado por Fèlix Millet. Renunció al cargo el 2 de diciembre de 2010 alegando que ya había completado su misión.

Desde enero de 2011 fue Director gerente de Edicions Bromera, una editorial con sede en Alzira, su pueblo natal. Posteriormente entre 2015 y 2017 ha sido gerente del ayuntamiento de Barcelona

dirigiendo los servicios jurídicos y de transparencia del Ayuntamiento.

El director de la agencia ha explicado que el trabajo del nuevo ente se basa en tres pilares: la prevención, los asuntos jurídicos y el análisis y la investigación, la parte donde serán dedicados más recursos y presupuesto. De forma temporal la Agencia Antifraude se ubicará en Les Corts pero está previsto que se traslade a unas nuevas instalaciones en las que no comparta espacio físico con ninguna institución. Sobre la posibilidad de un futuro traslado de la sede a las dependencias de la Generalitat, Llinares ha recalcado que «está complicado», aunque no ha cerrado la puerta a esta opción.