El secretario del ayuntamiento de Beniarbeig, Francisco Javier Querol Sancho, se jubila

Entre los diferentes puntos del orden del día del Pleno Extraordinario del pasado 17 de mayo, destacaba el del cese por jubilación de Francisco Javier Querol Sancho como secretario-interventor del Ayuntamiento de Beniarbeig. Una trayectoria profesional que se inició con su nombramiento el 23 de junio de 1989.

Aunque por el actual estado de alarma la sesión se tuvo que realizar sin asistencia de público, desde los dos grupos políticos se quiso agradecer la dedicación de Querol durante todos estos años, por lo que Vicent Sanchis, como portavoz los populares, le quiso dedicar unas palabras en nombre del Grupo Popular y poner así en valor su profesionalidad y sabiduría, que ha hecho que trabajando con él todo sea más fácil y sencillo, a la vez que ha tenido la habilidad de «compaginar lealtad al político de turno con la tutela y protección de los trabajadores del Ayuntamiento», y la capacidad para siempre tener« la solución al problema, la respuesta adecuada al consejo solicitado, el asesoramiento leal y sincero, y sobre todo mucha paciencia ».

Por su parte, desde el Grupo Socialista, la edil de cultura Sara Gil Peretó leyó el texto que había redactado la ex-concejala Celia Ruiz-Orejón, en el que a través de su experiencia ponía de manifiesto la valía de Querol para «ayudar y aconsejar a los que en su momento hemos gobernado y junto con nosotros has podido transformar el pueblo», al tiempo que destacaba que su opinión «objetiva y reflexionada siempre ha sido por los que la hemos querido aprovechar».

A continuación el alcalde Juanjo Mas, durante su intervención también elogió la trayectoria de Querol, afirmando que «sin los 31 años de trabajo e implicación en los proyectos, Beniarbeig no sería lo que ahora es».

Por supuesto, Querol también quiso dirigirse a los presentes con unas breves palabras de agradecimiento hacia todos los alcaldes y concejales que durante estas tres décadas han pasado por el consistorio, así como para todos los empleados públicos municipales, como los trabajadores de servicio, los agentes de la Policía Local y los compañeros de oficinas. Un agradecimiento que también quiso hacer extensible a toda la gente de Beniarbeig, «que desde el día en que tomé posesión, el 23 de junio de 1989, me hizo sentir como en casa, hasta el punto que desde hace ya casi 17 años vivo en Beniarbeig y me quedaré aquí mientras la vida quiera. »

Finalmente, en el mismo pleno también hubo un punto para nombrar al funcionario de carrera José-Simón Company Mengual como secretario-interventor accidental hasta que se cubra de nuevo la plaza, como así lo prevé el artículo 52 del Real Decreto 128 / 2018, de 16 de marzo y que queda resuelto a través del Decreto núm. 113, con fecha 05/06/2020 que justifica el nombramiento de Company en la sede «larga experiencia en las tareas de funcionario de Administración General del Ayuntamiento, su excelente nivel de formación, que acreditan los numerosos cursos de formación continuada que ha realizado en los últimos años, su alto grado de compromiso en las tareas que ha desempeñado y sus condiciones personales ».

TEXTO ÍNTEGRO DE LA INTERVENCIÓN DE FRANCISCO JAVIER QUEROL:

Al llegar, por mi jubilación, cosas de la edad, a finales de mi trabajo de casi 31 años como secretario-interventor del Ayuntamiento de Beniarbeig, que ha sido mi primer y único destino como secretario, doy las gracias a todas las personas que han ejercido cargos de responsabilidad en el Ayuntamiento durante todo este tiempo, a los alcaldes, José-Luis Sesé, que fue el primero, a Vicente Cebolla, Juanjo Mas, y a todos los concejales, por la consideración y el respeto que me han demostrado. Tengo un recuerdo especial en este momentos para dos personas que ya no están, Toni Gil Ronda, que fue teniente de Alcalde, y Luis Gil, que fue alcalde durante 20 años y con el que compartí todos estos años de trabajo y muchas ilusiones.

Quiero agradecer a la gente de Beniarbeig que desde el día en que tomé posesión, el 23 de junio de 1989, me hizo sentir como en casa, hasta el punto que desde hace ya casi 17 años vivo en Beniarbeig y me quedaré aquí mientras la vida quiera. Si pienso en toda esta buena gente de Beniarbeig que me ha hecho sentir su afecto desde el primer día, he de mencionar a Salvador, el juez de Paz, a quien es imposible no querer.

Pero son muchos más, Salvador es sólo un ejemplo, aunque muy estimado. Agradezco también a todos los empleados públicos del Ayuntamiento de Beniarbeig, personal laboral, agentes de la Policía Local, administrativos, a todos, el comportamiento que siempre han tenido conmigo, su compañerismo y su afecto. Entre ellos hay algunas de las personas que yo más quiero. Y especialmente agradezco a mis compañeros de la oficina municipal, con los que he trabajado codo a codo durante tantos años, la amistad y el afecto que me han dado y la ayuda que siempre han supuesto para mí; ellos me han hecho fácil el trabajo, gracias a ellos nunca me he sentido solo, en los buenos momentos, que han sido muchos, y en los menos buenos, que siempre los hay. A ellos, Antoñita y Manolo, que ya estaban cuando yo llegué y que han sido pilares del Ayuntamiento durante todo este tiempo, Quico, el arquitecto, que ha hecho y hace un trabajo tan importante para el pueblo, Simón, que es el ejemplo de funcionario eficaz y preparado, generoso en el esfuerzo, alguien muy valiente no se da ninguna importancia, desde hace unos años Felipe, que no desmerece a su lado, Pablo, que es el bibliotecario y algo más, Cecilia que se ha unido a ellos en estos últimos meses, a todos vosotros gracias. Nunca olvidaré lo que habeis hecho por mí.

Hay algo que creo que ya sabéis todos pero que quiero decir públicamente: Beniarbeig tiene un gran equipo de funcionarios y empleados públicos, que es la envidia de otros ayuntamientos. Y lo sé porque más de una vez me han dicho otros secretarios: tienes mucha suerte. Y es verdad, he tenido mucha suerte. Sé que ellos, todos los que trabajan en el Ayuntamiento de Beniarbeig, seguirán dando lo mejor de sí mismos a el servicio del Ayuntamiento y de pueblo. Porque ellos saben que somos servidores públicos y que cuanto más y mejor servimos, mejores somos profesionalmente y como personas.

Sabed vosotros, mis compañeros, el alcalde y los concejales y toda la gente de Beniarbeig que, ya como un simple jubilado, puede contar conmigo para todo en lo que pueda ser útil.

Para terminar quiero que mi última palabra como secretario en un Pleno del Ayuntamiento sea la que en este momento me nace de dentro: a todos, de todo corazón, gracias.