El Alcalde de Gilet recurrirá al TSJCV la sentencia que obliga a readmitir al secretario

El alcalde de Gilet, Francisco Aicart, ha manifestado que recurrirá al TSJCV la sentencia del juzgado de lo contencioso-administrativo número siete de Valencia, en la que se obliga readmitir al secretario interventor del ayuntamiento, Rafael Tomás, que fue suspendido cautelarmente de sus funciones, durante un plazo de seis meses, como consecuencia de una resolución de alcaldía de Febrero de 2005.

Ramón Sáez, el abogado del Consistorio ha explicado que, aunque respetan la sentencia de la magistrada, entienden que ésta “no ha valorado bien las pruebas ni tampoco ha tenido en cuenta toda la documentación que obra en el expediente, como por ejemplo, la declaración de Tomás donde reconoce que sí que dio una orden de pago de dinero público cuando no tenía la autorización para realizar esta acción”.

El letrado también indicó que la mujer que se benefició de los 140 euros de las arcas municipales “no era ni de Gilet ni de La Baronia ni tampoco pertenecía a una familia necesitada, ya que este matiz no se ha probado, simplemente mantenía una amistad con el secretario municipal”.

Sáez afirmó que la única persona que puede ordenar un pago de dinero público es o bien el alcalde de Gilet o el presidente de la Mancomunidad, Juan Arnal, ya que la Ley  reguladora de Haciendas Públicas establece que ningún funcionario puede ejecutar esta medida sin tener autorización y, según el abogado del Consistorio, Tomás carecía de este permiso.

No obstante, la sentencia afirma claramente que “es habitual que el Ayuntamiento realice pedidos al establecimiento y concretamente en innumerables ocasiones se ha servido productos de primera necesidad a transeúntes sin techo u otras personas necesitadas, a cargo del Ayuntamiento”. “El único sistema era, o bien una llamada desde el Ayuntamiento, por algún funcionario o por el señor secretario, o a veces por personarse el señor secretario y decir a quién debía entregar mercancía y hasta qué importe”.

De hecho, según el dueño del establecimiento donde “presuntamente el secretario había efectuado compras”, el actual equipo de gobierno sigue haciendo “exactamente” lo mismo.