Despedida del secretario general del ayuntamiento de Tarrasa, Jorge Baulies Cortal
El pasado 2 de diciembre de 1976 el Ministerio de la Gobernación dictó una orden por el que se nombra a D. Jorge Baulies Cortal, actual secretario de Tarrasa, como secretario General de Excmo. Ayuntamiento de Barcelona (BOE 23.12.1976).
El pleno celebrado el 7 de enero de 1977 fue el último pleno de D. Jorge Baulies Cortal en Tarrasa, esta es una transcripción del acta de la sesión:
Seguidamente y con motivo de tal nombramiento, el Sr. Presidente pronunció el siguiente discurso:
«El Pleno que celebramos tiene una singular circunstancia, como es la asistencia al mismo del Ilustrísimo señor Don Jordi Baulies i Cortal, en su última actuación profesional, como miembro de este Excmo. Ayuntamiento, en su cualidad de primer funcionario municipal y fedatario administrativo de tantas actuaciones per el protagonizadas con singular acierto y dedicación.
Es muy agradable para mi y constituye no solo un deber y un acto de justicia, al mismo tiempo que una gran satisfacción, el público reconocimiento por la dilatada actividad profesional, catorce años de servicios en esta Corporación tarrassenca con un espíritu de libertad, lealtad y acreditada competencia en el ejercicio de su función secretarial. Su trayectoria constituye un digno ejemplo y es obligado el público reconocimiento en este momento. Por Orden del Excmo. Sr. Ministro de la Gobernación de fecha 2 de diciembre de 1976 ha sido nombrado para ejercer la Secretaria General del Excmo. Ayuntamiento de Barcelona.
Es para nuestro querido amigo la culminación de su carrera administrativa y para nuestra ciudad una distinción. El Sr. Baulies pasa a ocupar un cargo que han tenido y ejercido figuras señeras como Don Esteve Gelabert de Bruriquer y Riera, también como el hijo de Granollers, Manuel Durán y Bas, insigne tratadista del Derecho Civil Catalá, y Josep Mª Pí i Suñer, uno de los más preclaros publicistas de Cataluña.
Por todo eso y hablando no sólo en nombre propio sino de todos los aquí presente, deseo expresar al amigo y compañero señor Baulies i Cortal, que, siempre contará con la gratitud y la verdadera amistad de todos.
También quiero proponer que en este acto se adopte acuerdo para otorgarle un voto de gracias en el cual va explicito el público reconocimiento a tan querida amistad y que conste en acta dicho acuerdo.
Desearle toda suerte de aciertos en su nuevo cargo, en el que no dudamos conseguirá toda clase de éxitos en su gestión, dada la indiscutible y probada competencia profesional y calidad humana.
Y finalmente, con un abrazo que en nombre de toda la Corporación le damos, -Sr. Baulies: Felicidades, éxito y nuestra gratitud más sincera”.
Los señores Concejales, puestos en pie, así como el público asistente, aplaudieron las palabras del Sr. Alcalde y el abrazo con que patentizó al señor Baulies la gratitud de todo el Consistorio, y de la ciudad por los servicios a ella prestados, quedando aprobada la concesión de un Voto de Gracias a D. Jorge Baulies Cortal.
Correspondiendo a tan afectuosas palabras y a los aplausos que se le habían dedicado, el Sr. Baulies contestó con las siguientes frases:
“Tras las palabras del Sr. Alcalde y los inmerecidos aplausos que me han dedicado, quiero expresar públicamente que este nombramiento por una parte me causa una gran satisfacción, ya que decir lo contrario no respondería nada a la verdad. Huelga decir que para nosotros, los funcionarios, hay unas metas primordiales en la profesión y el Ayuntamiento de Barcelona, es una de las más Importantes, por no decir la primera y más alta, y por esto tenemos una obligación de no eludir las responsabilidades que alcanzar una meta profesional nos impone.
Pero por otra parte el nombramiento también me causa un sentimiento de tristeza, de melancolía, ya que no puedo olvidar que en el ayuntamiento de Tarrasa han transcurrido casi 14 años de mi vida activa, que es una cifra muy notoria. Aquí he conocido tres Alcaldes, el Sr. Clapés, el Sr. Onandía ( q.e.p.d . ) y el Sr. Donadeu, con cinco corporaciones diferentes y cerca de un millar de funcionarios y empleados municipales. De todos ello tengo un gran concepto y una gran estima, a pesar de que se hayan producido diferencias, por otra parte, normales y hasta convenientes en estos casos, de composición tan diversa.
También tengo que manifestar que Tarrasa y su Ayuntamiento siempre estará presente en mi pensamiento, ya que tampoco puedo olvidar que este Municipio ha sido y es para mi un puesto de trabajo continuo, un banco de experiencias y donde mi vida profesional ha tomado la pincelada que solamente dan los Ayuntamientos de las grandes ciudades, con todas sus ventajas y sus inconvenientes, las alegrías y los disgustos, su grandeza y las cuestiones locales siempre asistido por los alcaldes, los concejales, los funcionarios y la benevolencia de los ciudadanos a los que en definitiva nos debemos todos los que estamos en la casa de la ciudad.
Y de manera especial quiero agradecer la ayuda de mis compañeros de los Cuerpos Nacionales, los Interventores Campins y De Nur, los depositarios, Sanllehí, Novo y Usón, el actual Oficial Mayor Balmaseda, que dentro de unos días tomará mi relevo y al que le deseo muchos éxitos en la nueva tarea de llevar la Secretaría, y a los Secretarios ya fallecidos, Lozoya y, principalmente, aquel gran Secretario que fue el Sr. Benlloch, maestro de, maestros, compañero entre los compañeros, de quien aprendí mucho con el ejemplo de su terrassenquisme, su competencia y su bonhomía.
Decía mi profesor de Derecho administrativo, Pí i Sunyer, que la vida nos enseñara. Más que los libros de leyes y los doctrinales en estos Ayuntamientos como el nuestro, nos enseñan la práctica diaria y el contacto vivo con los problemas. Mi acumulación de experiencias, de toda medida y de todos los colores, unos buenos, otros regulares y alguno no tan bueno constituye un bagaje que quiero agradecer a Tarrasa y a todos vosotros.
Se acerca el momento de mi marcha y en esta 179 sesión plenaria que el Ayuntamiento de Tarrasa celebra en que tengo el honor de actuar como Secretario, quiero aprovechar la ocasión para pedir indulgencia a todos los terraseencs, a las Corporaciones y a los funcionarios en aquellas cosas que no les haya servido como deseaban por los propios errores humanos que he tenido o por las barreras legales y, por otra parte, decir que no me salen suficientes palabras para agradecer como tanto y quisiera expresar mi gratitud al Sr. José Donadeu, a la Corporación actual y todos los precedentes, a todas las autoridades de Tarrasasa, a los funcionarios, a la prensa y a la radio, y a todo el pueblo tarrassenc, las atenciones y facilidades que por mi trabajo he recibido en catorce años de estar entre vosotros.
Con las palabras y la propuesta de acuerdo que me acaba de dedicar nuestro Alcalde, más dictadas por el corazón que por la cabeza y que son fruto de siete años de cotidiana y franca colaboración en el gobierno de la ciudad, no me queda más por deciros a todos que, como siempre y en todo lugar, quiero continuar siendo uno más entre vosotros y que en todo lo que pueda estoy a vuestra disposición.
Muchas gracias a Tarrasa, muchas gracias a todos».
Palabras del, señor Baulies que asimismo fueron ovacionadas por los señores Asistentes.