El alcalde de Otura “pretende apartar al secretario”
Así lo asegura la denuncia pública del Colegio de Secretarios, Interventores y Tesoreros de Administración Local
El Colegio de Secretarios, Interventores y Tesoreros de Administración Local (COSITAL) en Granada ha emitido este miércoles un comunicado en el que denuncia que «la arbitrariedad parece haber encontrado cómodo aposento en el sillón de la alcaldía del ayuntamiento de Otura. La última actuación del regidor, el señor Fernández-Sanz Amador, ha sido decretar unas vacaciones forzosas del secretario, en contra de su voluntad, en pleno proceso electoral.
«Esta grave imposición del Alcalde otureño fue denunciada este martes al Presidente de la Junta Electoral de Zona y a la Subdelegación del Gobierno de la Nación en Granada. No sólo es que se haya prescindido del procedimiento administrativo incumpliendo las más elementales normas jurídicas que lo regulan, sino que el acto tiene toda la apariencia de haber sido dictado para apartar al secretario del proceso electoral, a la vista del cúmulo de irregularidades y de ilícitas ingerencias detalladas en la denuncia», continúa la nota.
«Los secretarios municipales son, durante el proceso electoral, delegados de la junta electoral de zona, participan, por lo tanto, en la garantía de transparencia y objetividad del proceso electoral, y del principio de igualdad. Si de algo podemos estar orgullosos en nuestra democracia es de los procesos electorales celebrados desde 1977, todos ellos ejemplos de transparencia, juego limpio y respeto a la legalidad. La clave de este resultado está en la profesionalización e independencia de quienes dirigen este proceso, fundamentalmente miembros del poder judicial, auxiliados por secretarios municipales, como delegados de las juntas electorales de zona», aseguran.
«El alejamiento del secretario municipal de un proceso electoral, contra su voluntad y sin justificación alguna, es una clara interferencia del alcalde en las elecciones y una negra sombra que oscurece la transparencia y objetividad del proceso electoral en el municipio de Otura», mantienen.
Por último Cosital afirma que «esta nueva arbitrariedad supone una escalada en el empeño del Alcalde por librarse del Secretario para que no le estorbe en su huída de la legalidad, en esta ocasión atacando la base de la legitimidad democrática del Ayuntamiento. Las alarmas se han disparado, corresponde actuar a los responsables del control de la legalidad para que el sistema funcione».
Post Scriptum. Un antecedente: Marbella, año 1989, el alcalde de la localidad D. Jesús Gil y Gil decreta las vacaciones forzosas del secretario municipal. Esto fue el comienzo de una historia bien conocida por todos.